jueves, 8 de abril de 2010

HOLA, funciones propias e impropias del espacio


Immerso en la campaña del Clásico de este sábado y después de ver un comentario del Sr. Eduardo Inda, director de Marca, en el que acusa fervientemente al Sr. Ramón Calderón (presidente merengue que fue expulsado por la primicia Marca del robo de la asamblea) por haber tenido tan poca cabeza, según el periodista dice ahora, y haber organizado la final de la Champions League en el Bernabeu, no puedo sino añadir este incidente al blog que desde hace unos días rondaba por mi cabeza.

El día en que el Sr. Florentino Pérez habló del Mega-proyecto y la Super-producción que iba a llevar a cabo, a todo el mundo le parecía perfecto y PROPIO (aquello de uso lógico, normal y habitual) que el Real Madrid (con su ADN Champions) celebrase y ganase la final en su casa. Es más, una de las grandes motivaciones del proyecto era justo esa, conseguir la Champions en su estadio. Si somos el equipo que más veces la ha ganado y fichamos a los mejores del mundo, pensaban ellos, ¿qué más PROPIO (dándola ya por ganada) que poner el colofón final en el campo de nuestros amores?

Ahora, después de que el Madrid cayese penosamente eliminado contra un equipo segundón hace un mes, y de que el F.C. Barcelona tenga todas las papeletas para llegar a la final, e incluso ganarla; parece totalmente IMPROPIO (extraordinario, extraño, incluso bizarro, fuera de su uso corriente) que alguien encabezando una entidad cómo el Real Madrid, tubiera la poca perspectiva durante su mandato de ejecutar una empresa cómo esa, desoyendo los consejos de sus más allegados e ignorando los problemas extra de presión para ganarla que eso podía suponer a los jugadores, y lo que es peor, que olvidase la cantidad de portaditas ya preparadas para la gran fiesta que se tendrían que tirar a la papelera de reciclaje (esperando tiempos mejores quizás) en el caso de que todo no surgiese como aparecía impreso ya en el guión. ¡¡Qué pocas luces, por favor!!

Dejando un poco de lado la hipocresía que últimamente veo por todas partes e intentando dar a conocer a la gente más próxima a mí algunas cosas que merecerían ser vistas por alguien más, he decidido subir al youtube un fragmento de la primera película que vi no hace demasiado del director en cuestión, Tsai Ming Liang, que es tan desconocido aquí en España como en su país de origen, Taiwan.

La película en sí, "Good Bye, Dragon Inn", tiene todas las características del malísimo cine independiente actual, aunque tiene también muy bien ejecutadas, algunas de las mejores virtudes del gran cine; dándome un sabor final muy agridulce, todo lo contrario que "El Sabor de la Sandía", su más conocida y mejor película, según mi opinión, de las seis o siete que le he visto.

Éste es el link para el fragmento (mis novatadas de blogger me impiden poder enlazar directa y correctamente el vídeo en esta página):

http://www.youtube.com/watch?v=Mtm-eCOmPBw

IMDB anuncia que su trama es: "En una oscura y húmeda noche, un cine chino proyecta su última sesión. Juntas, unas cuantas almas darán su "Goodbye, Dragon Inn""

Cuando uno la empieza a ver y lleva con ella cinco minutos, lo habitual si eres un espectador normal, es cerrarla. Yo lo que hice fue minimizarla y aprovechar el tiempo leyendo todo lo relacionado con la vida de ese día de CR$ y Guti (cómo me gustan sus pases y eso que soy del Atlético) y las últimas declaraciones a favor de la independencia de Laporta que aparecían en MARCA, para después gastar el susodicho tiempo borrando de las bandejas de entradas los correos SPAM (de publicidad).

Volviendo a la peli se me antojaba de planos largos y vacíos, dónde el director tiene que decir el tiempo de meditación que vive continuamente y bla bla bla en un cine dónde se ve una película de samurays (por lo del baile de espadas que viene al tema) que horas después descubriría que se llama "Dragon Inn", cómo el título que le da nombre.
Pues ahí estaba yo a punto de quitarla ya, cuando llega el plano (sin flipadas: de lo mejor que he visto, el mejor de la última década casi seguro) de los tíos en el lavabo. Con suerte, los que borrabais el SPAM, habréis llegado a verlo. En ese momento digo ¡¡ostia, que aquí hay algo!!

El momento en sí hizo que volviese a ver todo el filme hasta ese momento (quince minutos, poca cosa) y empezase a dar sentido a todo en general. La mayoría de todo lo que vale la pena ver de la película, está en el fragmento que os he puesto. En la película dura más, tiene algún momento que he recortado, pero de los más o menos once minutos que van seguidos, el trocito se ha quedado en poco menos de nueve.

                                                               ·

                                                             
                                                               ·

Dos personas en un urinario, unas puertas cerradas a la izquierda, un lavamanos y la puerta de entrada al baño al fondo del espacio y el movimiento de algunos personajes que ni tan siquiera abren la boca son suficientes para, y esto es lo grande: tener la capacidad de desvelar, ocultar y generar más secretos en la mente del espectador, obligándolo a repensar lo visto. Ahí te lo planteas todo: las idas y venidas de los asistentes a la sala en sus butacas; la vuelta del baño del abuelito que no sabemos si viene de allí por algún motivo que el que parece su nieto (el único al que realmente le interesa la película de las espadas) desconoce; el porqué se había olvidado allí ese paquete de tabaco junto con el mechero el señor que después lo va a buscar; cómo puede ser que el servicio de mujeres esté totalmente vacío y en el de hombres apenas quede espacio libre, etc, ...

... todo para llegar a la conclusión de ¡qué mal están los cines en algunos sitios! que se deben cerrar porque su PROPIA actividad no les da el dinero suficiente como para subsistir y en el que las ¿IMPROPIAS? relaciones entre homosexuales no declarados en un país de prohibiciones como Taiwan toman partido mientras la mujer que se encarga del negocio, que pobrecita está coja, tiene que comer sola mientras oye de fondo la música del espectáculo sin saber lo que sucede en los urinarios y las puertas cerradas del baño al que según su género, tiene la entrada no admitida.

Lo bueno del director es que ni entra ni sale del tema gay porque no le interesa y eso es lo que me gusta y lo que hace que cualquier persona sin compartir tendencias sexuales con los personajes pueda  entender y vivir las penosidades de su condición en el entorno en el que viven. Tsai Ming Liang intenta mostrar una serie de comportamientos que suceden en un espacio y en un país y es cada espectador el que se va haciendo las preguntas y las respuestas en relación a todo lo que ve.

Es la única película de las que vi suyas que trata sobre el tema.

Aún recuerdo lo bien que me pareció que un cine de una localidad próxima a Vic se utilizase después de su clausura cómo lugar para conciertos, en aquel caso de Rap'Susklei. Nada mejor que una antigua sala de cine para tener un buen sonido y mucha comodidad, pasando a ser un uso totalmente PROPIO para los músicos que allí iban a empezar a brindar música a los asistentes.

He oído por ahí, y no una sino bastantes veces, que el futuro del cine no está ya en las salas. Cómo consumidor de películas en salas habituales, en internet streaming, en DVD, en filmoteca, en VHS, en descarga directa y sobretodo NO en IPODS ni PSPs, y puedo decir cómo todo el mundo, que en ningún lugar se ven tan bien cómo en la sala. Los últimos cañonazos de la publicidad y del gigante de la industria tienen nombre de 3D. Aún no he visto 3D real en ninguna de esas "nuevas películas" y dudo que lo vaya a ver en un futuro. O desenfocan el fondo y le llaman 3D última generación, o aplican un post-3D a una película que no fue concebida para ese formato en su inicio.  Si eso es todo lo que pueden ofrecer creo que lo llevamos claro, aunque creo que siempre habrá un buen sitio para las imágenes en movimiento.

Con el objetivo de una nueva síntesis posterior en las personas que hayan leído el blog sobre las reflexiones aquí tratadas, deseo haber acercado un poco otros tipos de cines posibles e igual o más buenos que el que estamos acostumbrados a ver, y con el propósito de no quedarnos siempre con lo que nos dan masticadito o con las primeras impresiones que nos pueden dar algunas personas (cómo bien demuestra ese gran plano), me gustaría dedicar este blog a esa que tantas y tantas veces me ha tratado de homófobo y racista. Espero a través del cineasta Tsai Ming Liang que la tolerancia vaya adquiriendo adeptos en este mundo e intentemos ser cada vez más justos y razonables tanto en nuestros valores como en nuestros actos.

¡Hasta el próximo!

PD: No ha acabado siendo tan alegre como prometí la otra vez. Lo intentaré mejor la semana que viene ; )

PD2: Se me ha ocurrido que puedo poner el inicio de "El sabor de la Sandía" que seguro que después más de uno tendrá ganas de verla entera. Por cierto, el tema es el mundo del porno en Taiwan y las relaciones que provoca la escasez de agua en el país. Disfrutad!!

http://www.youtube.com/watch?v=hlF50nm12Rs

2 comentarios:

  1. Home, això que el pròxim blog serà més alegre amb El Sabor de la Sandía, tampoc pots ser "la alegría de la huerta" jajaja. Felicitats pel nou blog i recomanar bones pelis :)

    ResponderEliminar
  2. ajajaj bona bona. El pròxim no serà sobre la peli tiu, potser m'he explicat malament xDDDD
    Ens veiem! ; )

    ResponderEliminar