lunes, 29 de marzo de 2010

Atención: Lengua en peligro!


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Hay diversas razones que me han llevado a empezar a escribir un blog, algunas son más interesantes que otras, pero al fin y al cabo sólo han sido el medio para abrirme una de estas cuentas y empezar a hablar conmigo mismo, y quién sabe si con alguien más que quiera proponer un diálogo comunicativo en respuesta.

De alguna manera hay un inicio cíclico en esto, y el hecho de que hace más de cuatro años estubiese la película que voy a recomendar dentro del paquete de las que me hicieron cambiar una opinión en relación a algo, y hoy sea esa misma la que me ha dado el último empujón para abrir este blog, seguro que no tiene nada de coincidente. El mismo drama de fondo, quizás.

Dejar atrás los engaños, empezar a ser sinceros y hablar con conocimiento de causa sabiendo cúal graves daños pueden suponer algunas "pequeñas mentiras" o algunos "pequeños indicios o rumores" sobre otra gente. Creo que deberían ser unos buenos objetivos para cada individuo, desde luego para mí lo son.

Cuando la persona que habla no tiene la seguridad de lo que dice y de lo que puede provocar es seguramente "el mejor" de estos casos.

"El peor", es cuando el que lo hace, o los que lo hacen, conocen y son perfectamente conscientes de qué manipulación y que sometimiento pueden estar generando, e intentan obtener el máximo beneficio de ello sin tener los más mínimos escrúpulos con los demás, siendo capaces de mentirse y buscarse mil tipos de excusas para justificar "en el nombre de la confianza, del trabajo bien hecho, o de lo que se quiera añadir" sus ejecuciones sin que les causen el menor remordimiento.

Dicho esto, doy paso a la película (que tiene 45 minutos finales tremendos) que habla de este tipo de cosas en su transfondo. No necesita presentación porque ya es bastante conocida: OLDBOY. Por si alguien no la ha visto no haré ningún tipo de comentario. Es muy fácil de encontrar, está editada en DVD desde que salió.

Siguiendo lo que propone el filme, habrá que tener en consideración la lengua de cada uno antes de empezar a hablar. Seguro que en alguna antigua cultura milenaria hacían algun destrozo parecido a los mentirosos o a los que hablaban demasiado sin saber cual serían sus consecuencias.

Leyendo por aquí y por allá he visto que Spielberg acaba de comprar los derechos para hacer un remake de la misma (dónde se encontrará con la amiga Manipulación y seguramente la otra amiga Mentira) que estará listo en 2012. ¿Porqué no intenta hacer a la gente más tolerante a cosas diferentes y no trata de reconducir siempre las cosas para su beneficio? ¿Racismo? ¿Desconfianza en ese público que tantos ingresos le da? ¿Esto es lo que el gran magnate del cine mundial tiene que aportar?

Hasta aquí mi primer blog, el próximo será seguro un poco más alegre.

Por ahora disfrutad de esas dos lenguas largas a punto de besarse en el montaje, quién sabe si venenosas o no. En todo caso, esperemos que las lenguas largas de verdad, esas que no se ven a simple vista y que seguramente no lleguen a tocarse la nariz, sólo encuentren la comunicación entre ellas y el rechazo entre las demás.

PD: Este primer blog va dedicado a esas malas lenguas que he conocido durante toda mi vida, que ya van siendo muchas. ¡Espero estar siempre lejos de vuestro alcance!